El Hombre de Neandertal. La "otra" Humanidad.

Querida hija:

El Premio Nobel de Fisología o Medicina de este año 2022 ha sido concedido al biólogo sueco-estonio Svante Pääbo, "por sus descubrimientos sobre los genomas de homininos extintos y sobre la evolución humana". Es la segunda vez en la Historia del Nobel que éste se concede a un campo de sabor zoológico, tras el premio a la Etología, la Ciencia del comportamiento animal, en 1973. El principal logro de Pääbo fue la secuenciación, en 2013, del genoma de nuestro pariente extinto más cercano: el hombre de Neandertal, cuyos resultados arrojaron información muy valiosa para entender lo que fue este homínido, sus relaciones con el humano moderno y, en definitiva, sobre la propia evolución humana. Por eso creo que es el momento perfecto para que conozcas quién fue el Hombre de Neandertal.

Interpretación del aspecto de los neandertales por el artista Tom Björklund

Introducción: el descubrimiento de nuestro primer "primo"

Año 1856.

La Revolución Industrial acaba de desatarse en Renania, la región de la actual Alemania limítrofe con Bélgica y Francia, y en aquél entonces bajo la soberanía del Reino de Prusia. Los abundantes yacimientos carboníferos del Valle del Ruhr empezaban a ser utilizados para alimentar los altos hornos que producían el acero para la construcción naval y ferroviaria, empezando el camino hacia el calentamiento global que hoy destruye el planeta. La actividad minera era incesante por toda la región. Los idílicos campos, montes y bosques empezaban a ser destripados, talados y quemados en nombre de un "progreso" que ya vemos adónde nos ha conducido.

El cercano Valle de Neander (Neanderthal en alemán) veía cómo los mineros destrozaban las cuevas de la zona buscando piedra caliza para la construcción de las nuevas ciudades industriales en expansión. En la Cueva de Feldhofer los mineros encontraban molestos huesos que les estorbaban en su labor y los arrojaban a una escombrera sin hacerse demasiadas preguntas al respecto. Sin embargo, los propietarios de la cantera sí se hicieron preguntas ante aquellos huesos y sobre todo ante lo que parecía la parte superior de un cráneo humano. Por tanto enseñaron los huesos al profesor de ciencias naturales Johann Carl Fuhlrott, que enseñaba en la cercana localidad de Elberfeld.

Dibujo que representa los restos de Neandertal 1, los primeros de esta especie encontrados

Fuhlrott reconoció inmediatamente dichos huesos como humanos y, además, muy antiguos. Por tanto, enseñó los huesos a Hermann Schaaffhausen, profesor de Anatomía de la Universidad de Bonn, y al año siguiente ambos anuncian su descubrimiento de lo que parecía ser restos de una antigua especie humana, diferente de los humanos modernos. Finalmente fue el geólogo británico William King quien bautizó a esta nueva especie humana en 1864 como Homo neanderthalensis, el "Hombre del Valle de Neander". 

Este hallazgo tuvo una importancia extraordinaria. No sólo porque fue el primer humano descrito aparte del Homo sapiens sino porque su descubrimiento y estudio supuso el nacimiento de una nueva ciencia: la Paleoantropología, que estudia los restos de los humanos extintos del pasado y reconstruyen la evolución humana. Schaaffhausen y Fuhlrott pueden reclamar ser los fundadores de esta ciencia, que tendría un largo recorrido: en 1894 se descubriría la tercera especie de Homo: el Homo erectus por parte de Eugene Dubois, y el resto de homininos fósiles se irían descubriendo en los siglos XX y XXI.

Por cierto. La cueva de Feldhofer sería finalmente destruida por la explotación minera de piedra caliza y hacia 1900 ya se había perdido todo rastro de su ubicación. Y esto era un fastidio para los paleoantropólogos, que se veían privados de poder estudiar el contexto geológico y encontrar más fósiles allí. Pero una investigación llevada a cabo en 1997 localiza la ubicación de la desaparecida cueva y se pueden recuperar 24 fragmentos de huesos de Neandertal, uno de los cuales encaja perfectamente con los restos del ejemplar originalmente encontrado, denominado Neandertal 1, y custodiado como holotipo de la especie en el Rheinisches Landesmuseum de Bonn desde 1877.

Placa conmemorativa del hallazgo del primer resto de Neandertal donde estuvo la Cueva Feldhofer

Este ejemplar originario fue datado hace 40.000 años y posteriormente se supo que fósiles encontrados anteriormente en la Cueva de Schmerling, Bélgica, en 1829 y en 1848 en la Cantera de Forbes, en Gibraltar, eran correspondientes a hombres de Neandertal, pero en aquellos momentos nadie realizó el estudio correspondiente y se atribuyeron (como era normal en la época) a "restos de humanos ahogados en el Diluvio Universal".

Precisamente el hecho de que el ejemplar del Valle de Neander sí fuera descrito como una nueva especie humana se debió en gran parte a la publicación del famoso libro El origen de las especies, de Charles Darwin, en 1859, que inmediatamente supuso una revolución en la Historia Natural.

Quién es el Hombre de Neandertal.

Tras más de 170 años estudiando restos de Neandertales que se han encontrado en numerosos yacimientos, son muchas cosas las que sabemos sobre ellos. Pero aquí te quiero contar las más importantes que debes conocer para hacerte una idea de sobre quién estamos hablando.

- Se trata de una especie de humano diferente del humano moderno: más robusto, con una estatura que podía llegar a los 1,65 m y unos 70 kg de peso, extremidades cortas y un cráneo muy característico: achatado en sentido vertical, con la frente huidiza, sin mentón, con la mandíbula inferior sobresaliente con respecto de la superior y con acusados y muy característicos arcos superciliares sobre los ojos. Su caja torácica era amplia y su capacidad cerebral mayor que la del humano moderno: 1.550 cc contra los 1.200 cc que tenemos nosotros.

Interpretación del Hombre de Neandertal por Zdenek Burian

- Su distribución era eurasiática: sus yacimientos se han encontrado desde la Península Ibérica al oeste hasta más o menos los Montes Altai en el este y desde Europa Central en el Norte hasta Palestina en el Sur. Nunca se han encontrado restos de neandertales en África. Son muchos los yacimientos paleontológicos que nos han dado información de los neandertales, también en España, especialmente la Cueva del Sidrón, en Asturias, con restos de neandertales datados de hace 49.000 años.

- Su cronología es la siguiente: desde hace 400.000 años hasta hace 28.000. Es decir, el Hombre de Neandertal vivió en el Pleistoceno Medio y Final, y se "comió" el interglacial Mindel/Riss, la Glaciación Riss, el interglacial Riss/Würm y gran parte de la Glaciación Würm, la última de la serie por el momento.

¿De dónde salió el neandertal?

Cuando tratamos de reconstruir el árbol filogenético de los homininos y determinar quién descendió de quién, ya entramos en el campo de las interpretaciones y suposiciones a partir de un registro fósil cada vez más completo pero siempre insuficiente. Los paleoantropólogos tienen que resolver un rompecabezas de mil piezas del cual tienen como mucho veinte, con lo cual siempre hay que tomar las conclusiones con prudencia.

Réplica del cráneo mejor conservado conocido de neandertal, hallado en La Ferrassie, Francia. Musée de L'Homme, París

Ahora bien, en el caso que nos ocupa existe un cierto consenso científico al considerar a Homo heidelbergensis (por cierto, el primer hominino descrito en el siglo XX y tercero de todos los tiempos) como último antepasado común tanto de neandertales como de sapiens. Se piensa que la línea que dio origen a los neandertales y la que dio origen a los sapiens se separó hace entre 730.000 y 550.000 años. Se supone que H. heidelbergensis fue uno más de los homininos que se originaron en África y luego salieron de ella de tal forma que una parte de su población colonizó Europa y otra parte permaneció en África donde podría haber dado origen a H. rhodesiensis, que se integró en el futuro origen de H. sapiens.

En Europa, una teoría dice que H. heidelbergensis se refugiaría en las Penínsulas mediterráneas durante las glaciaciones, y allí se producirían las modificaciones evolutivas que darían origen al neandertal. No está clara la cronología de transición entre H. heidelbergensis y H. neandertalensis, y por eso algunos autores retrasan la aparición de los primeros genuinos neandertales hasta hace 230.000 años. En cualquier caso, para entonces H. sapiens acababa de aparecer en África.

Cómo vivían los neandertales

Del mismo modo que anatómicamente se sabe mucho sobre los neandertales, del contexto de sus yacimientos también se sabe mucho sobre cómo vivían. Para empezar, sabemos que cuidaban a sus enfermos y que enterraban a sus muertos. Por los estudios genéticos sabemos también que los varones permanecían en su clan o comunidad (compuesta por grupos de entre 10 y 30 individuos) mientras que las mujeres eran las que cambiaban de clan al llegar la madurez sexual y evitar así la consanguinidad. Estos mismos estudios sugieren que había tres linajes genéticos dentro de los neandertales: Europa centro-occidental, Europa mediterránea y las poblaciones de más allá del Cáucaso.

Ejemplos de industria lítica musteriense

Sabemos también que los neandertales produjeron su propia cultura: la industria Musteriense (llamada así por el yacimiento francés de Le Moustier), consistente en piezas talladas en piedra mediante la técnica levalloisiense, que consiste en la obtención pieza a pieza a partir del núcleo del material lítico original. Se conocen lascas, raederas, puntas, hachas de mano, herramientas cortadoras, raspadores, denticulados, etc.

En cuanto a su alimentación, siempre se ha supuesto que ésta era predominantemente carnívora pero las últimas investigaciones sugieren un amplio espectro de materia vegetal que era habitualmente consumida por los neandertales, entre los que se encuentran incluso dos tipos de plantas medicinales como la camomila y la aquilea, lo que sugiere un conocimiento empírico de este tipo de plantas en su entorno. También hay evidencias de consumo de marisco en los lugares donde éste se hallaba disponible. Los especialistas creen que el neandertal no era capaz de cazar y matar grandes presas animales por sus técnicas de caza y sus herramientas disponibles, sino que más bien cazarían animales medianos y pequeños: hay evidencia de que el ciervo rojo sería el animal más cazado por los neandertales. También hay indicios de canibalismo.

Representación de un enterramiento neandertal

Existen dos aspectos en los que la comunidad científica se halla dividida y no ha encontrado aún un consenso.

El primero de ellos es sobre si el neandertal tenía o no capacidad de hablar. Como te contaré más adelante, los trabajos de Pääbo encontraron que el neandertal tenía el mismo gen (FOXP2) que en los humanos modernos gobierna la capacidad del lenguaje. Ahora bien, eso al parecer no es condición suficiente (si bien tal vez necesaria) para desarrollar la capacidad y la práctica de un lenguaje complejo y estructurado. Existen 11 de los 48 genes que gobiernan el sustrato neurológico del lenguaje donde el neandertal difiere del sapiens y si bien el neandertal tiene un aparato fonador y un hueso hioides, éstos no parecen ser idénticos a los que tenemos los sapiens, y por eso los científicos encuentran razones tanto a favor como en contra de reconocer al neandertal capacidad de lenguaje, al menos a nuestro estilo.

Arte rupestre atribuido a neandertales. Cueva de La Pasiega. Foto: Standish/Pike/Hoffman

El segundo se refiere a si los neandertales tenían o no pensamiento simbólico como nosotros lo tenemos. Existen indicios como por ejemplo intervenciones en paredes de algunas cuevas que algunos interpretan como "arte abstracto" por parte de los neandertales que las habitaban, aunque los neandertales nunca llegaron a desarrollar un arte parietal semejante ni comparable al nuestro. También se han encontrado garras de águilas y plumas de aves dispuestas de forma que pueden interpretarse como adornos personales, y sucede lo mismo que con la capacidad del lenguaje: hay quien los interpreta como pensamiento simbólico y hay quien no.

Las relaciones Neandertal- Sapiens. Los hallazgos de Pääbo.

Tal como te expliqué al comienzo de esta crónica, Svante Pääbo y su equipo del Instituto Max Planck de Antropología de la Evolución, en Leipzig, Alemania, logró el Premio Nobel de Fisiología o Medicina este año gracias a su secuenciación del genoma del Neandertal. Esto es una hazaña científica de primer orden ya que el ADN que se recupera de restos de tal antigüedad a menudo son inservibles para su estudio por contaminación de muchos tipos. El gran mérito de Pääbo fue desarrollar avanzadas técnicas que permiten aprovechar este ADN y extraer de él información válida para su estudio.

Finalmente en 2010 anunció que había obtenido un borrador de secuencia del genoma del Neandertal, y también de otros cinco genomas de humanos modernos actuales de varias procedencias geográficas para realizar las oportunas comparaciones. Sus hallazgos fueron interesantísimos.

Árbol filogenético de los homininos. Procedencia: The Economist

Para empezar, se confirmó que el Hombre de Neandertal no es un antepasado del sapiens, sino una especie "hermana" que desciende de un antepasado común con nosotros que presumiblemente es el Hombre de Heidelberg como ya te comenté antes. También, aparte de encontrar en el Neandertal el "gen del lenguaje" como te acabo de indicar, también se encontró evidencia genética de que los Neandertales también podían ser de piel blanca y pelo pelirrojo como sucede con muchos humanos modernos. También se encontró que el grupo sanguíneo 0, el más abundante de entre los humanos modernos también estaba presente en los neandertales, lo que sugiere que la mutación que dio origen a este grupo sanguíneo se remonta al menos hasta el antepasado común a ambas especies.

También se pudo constatar que el neandertal tenía una menor diversidad genética que los sapiens y que su capacidad olfativa era un 12% menor a las de los primeros humanos modernos así como la incapacidad de algunos individuos neandertales de percibir el gusto amargo.

Pero el hallazgo más impactante de Pääbo y su equipo fue el hecho de que en los genomas pertenecientes a individuos eurasiáticos modernos se encontró material genético de Neandertal en un porcentaje que oscilaba entre el 1% y el 4%, mientras que estaba completamente ausente de los genomas africanos modernos. Esto sólo podía significar una cosa: que el H. sapiens llegó a tener intercambio genético con Neandertales al menos hace 50.000 años en la zona de Oriente Medio cuando los sapiens abandonaron África y se encontraron en su camino con los neandertales más cercanos. Al parecer, hubo otro episodio de intercambio genético entre sapiens y neandertales hace 100.000 años, de más difícil interpretación.

Svante Pääbo ha sido galardonado con el Nobel de Fisología o Medicina. Ilustración: Niklas Elmehed

Es decir, que en tu genoma y en el mío, hija mía, tenemos un 2% de material genético neandertal porque nuestro origen es eurasiático. Fascinante, ¿verdad?.

Pero los sensacionales hallazgos de Pääbo no terminaron aquí. Mientras analizaba el genoma de restos de Neandertales encontrados en la Cueva de Denisova, en el Altai siberiano, un lugar habitado por homininos al menos desde hace 125.000 años, encuentra genoma de una especie humana completamente diferente, procedente de una falange de un individuo joven datado de hace entre 48.000 y 32.000 años. En 2010 se anuncia el descubrimiento del Hombre de Denisova, que todavía no ha sido descrito como especie, y se calcula que denisovanos y neandertales divergieron hace entre 470.000 y 380.000 años, una vez que ésta línea ya había divergido del sapiens. También se encontró evidencia de introgresión genética de Neandertales en Denisovanos.

La extinción del Hombre de Neandertal

Como le sucede a toda especie animal, Homo neanderthalensis cumplió su ciclo vital de origen - expansión - madurez y extinción. Los últimos neandertales, al parecer, se encontraron en la Península Ibérica donde debieron hallar un último refugio donde exhalar su último aliento como especie hace entre 31.000 y 25.000 años, en yacimientos como La Carihuela (Granada) o Gorham, Gibraltar.

El problema es que la etapa final de los neandertales como especie coincidió con la expansión del H. sapiens por Eurasia, que se produjo en dos direcciones desde Oriente Medio: una hacia el oeste a través de los Balcanes hacia Europa y otra hacia el nordeste hacia Asia hace entre 60.000 y 40.000 años. Es inevitable pensar, y así lo han hecho los científicos, si el sapiens no tuvo algo que ver en la extinción de los neandertales. Existen varias teorías al respecto y debo advertirte que el debate aún está lejos de cerrarse.

En azul: expansión de los humanos modernos. En marrón: reductos neandertales

La primera teoría dice que los sapiens exterminaron a los neandertales en una especie de "Guerra Mundial Z" a base de batallas y pasar a cuchillo a los neandertales así, por las buenas. Esta teoría parece hoy día completamente desechada al no haber ninguna evidencia que la sostenga. De hecho, está documentada la coexistencia de sapiens y neandertales en diversas regiones sin que aparezca ninguna prueba de ningún conflicto directo entre ambas especies en dichas regiones.

La segunda teoría dice que la domesticación del perro por parte del sapiens confirió a los humanos modernos ventajas que serían definitivas sobre los neandertales en su competencia por el alimento. Una vez más nos encontramos con la falta de evidencias sobre este hecho, muy difícil de evaluar y valorar.

La tercera teoría es la catastrofista. Ya sabes que cuando a algunos se les seca el cerebro y no se les ocurre nada coherente, recurren a meteoritos y erupciones volcánicas para explicarlo todo. En este caso la teoría se desecha sola porque las supuestas erupciones volcánicas que supuestamente exterminaron a los neandertales, al parecer ni afectaron a los sapiens ni a ninguna otra especie animal coterránea con ellos.

La cuarta teoría es la asimilación genética. O sea, en plan los sapiens no pasaron a cuchillo a los neandertales pero al parecer sí se pasaron por la piedra a sus mujeres, de tal forma que los sapiens en realidad, no seríamos sapiens sino una especie híbrida entre sapiens y neandertales, cosa que la evidencia genética no sostiene. Una cosa es que se hayan documentado contactos genéticos esporádicos (ese 2% de genoma neandertal que tenemos algunos) y otra cosa es una hibridación de especies, cosa que no se ha producido.

La quinta teoría es el cambio climático. O sea, que los neandertales no habrían aguantado la Glaciación Würm mientras que los sapiens sí lo habrían hecho. A ver...los neandertales ya se habían comido otras glaciaciones con anterioridad y habían salido airosos de ellas. Los neandertales eran una especie que estaba completamente adaptada a su entorno, lo que incluía a las oscilaciones del clima, si bien no se puede descartar que en los peores momentos de la Edad del hielo emigraran a las Penínsulas Mediterráneas. Pero la verdad es que esta teoría tampoco se sostiene.

¿Qué pasaría si los neandertales no se hubieran extinguido?

Y llegamos a la sexta teoría. La "competencia deportiva" entre sapiens y neandertales. Sucedería que hubo una competencia por los recursos. Los sapiens, cierto es, trajeron una organización social más fuerte y flexible, más colaborativa y cohesionada con nuestro lenguaje estructurado, y con nuevas técnicas de caza que nos permitieron aprovechar los grandes animales de la Megafauna en plena época de escasez glacial de una forma que, como ya sabemos, los neandertales no eran capaces de hacer. 

Al tratarse los sapiens de una especie pujante y dinámica, que crecía en número y se iba extendiendo con éxito por Europa aprovechando los recursos de una manera más eficiente, iría quedando menos comida y espacio disponibles para los neandertales, que se fueron retrocediendo al rincón más occidental de Europa donde los sapiens llegaron en último lugar hasta que ya tuvieron dónde ir, extinguiéndose. Esta teoría sí tiene sentido desde el punto de vista biológico de competencia entre especies similares por recursos similares. Tal vez los tiros vayan por ahí.

En cualquier caso, creo sinceramente que la extinción es lo mejor que le pudo pasar a los neandertales. ¿Te imaginas lo que hubiera pasado si la Humanidad neandertal hubiera sobrevivido?. No es difícil imaginarlo: los sapiens habríamos sometido a los neandertales a esclavitud, abusos, discriminación y quien sabe si no hubiéramos acabado exterminándolos, esta vez sí, pasándolos a cuchillo. O encerrándolos en cámaras de gas. 

De esto sí que NO me cabe ninguna duda.

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