Nazis en el Tibet. La fauna de la Expedición Schäfer (I)

Querida hija:

Se cumplen 80 años del final de una de las expediciones científicas más controvertidas y extrañas de la Historia. En 1938 la SS hitleriana inspiró y auspició una expedición multidisciplinar al Tibet, liderada por Ernst Schäfer, un experimentado zoólogo alemán. Ha habido mucho secretismo en torno a los verdaderos objetivos que perseguía esta expedición, supuestamente relacionados con temas esotéricos y pseudo-científicos, pero lo que aquí pretendo fundamentalmente es hablarte de los interesantes resultados zoológicos que mostró este viaje sin renunciar, por supuesto, a arrojar algo de luz sobre una expedición que ha sido pasto de la especulación y el sensacionalismo periodístico.

Los integrantes de la Expedición Schäfer, en Tíbet.

Ernst Schäfer: breve semblanza biográfica

Nuestro protagonista nace en 1910 en Colonia, Alemania. Como siempre sucede con aquellos que están destinados a ser naturalistas, ya desde pequeño pasaba mucho tiempo al aire libre, observando pájaros, insectos y reptiles. Como era natural, estudió Zoología en la Universidad de Gotinga, simultaneando sus estudios con trabajos en observatorios de aves en Dinamarca y en la Isla de Heligoland (en el Mar del Norte). 

Fue precisamente en el Observatorio de Aves de Heligoland donde conoce a Hugo Weigold, un zoólogo pionero en el anillamiento de aves, y que realizaba allí estudios sobre aves migratorias. Weigold había realizado una expedición a China Central y Tibet entre 1913 y 1916, y tomó bajo su protección al joven y prometedor Schäfer. Cuando el naturalista estadounidense Brooke Dolan II, de la Academia de Ciencias de Filadelfia, organiza en 1930 una expedición a China y Tibet oriental, en la que iba a participar Weigold, éste logra que Schäfer les acompañe. La expedición se realizó entre 1931 y 1932, y su participación fue tan positiva que, cuando Dolan organiza una segunda expedición a la región entre 1934 y 1936, se lleva de nuevo a Schäfer.

Ernst Schäfer

Los resultados zoológicos de ambas expediciones fueron muy buenos, y Schäfer adquirió una valiosa experiencia en la localización y preparación de especímenes zoológicos, así como en viajar por una región difícil y peligrosa. En 1933 publica en Alemania su experiencia en la primera expedición en la obra Berge, Buddhas und Bären ("Montañas, Budas y Osos"). Tras la segunda expedición Dolan, Schäfer emite la teoría de que el famoso Yeti no es más que el oso pardo tibetano (Ursus actos pruinosus), opinión que se ha confirmado hace muy poco tiempo.

Schäfer, por tanto, se convierte en un científico conocido y prometedor en Alemania dentro de su campo de estudio. Completa sus estudios y en 1938 realiza su doctorado basándose en su estudio de aves tibetanas.

Pero para entonces había llamado la atención de un poderoso personaje de la Alemania Nazi: nada menos que Heinrich Himmler, el jefe de las temidas SS y de todo el aparato policial de la dictadura nazi. ¿Qué podía él necesitar de un zoólogo?.

Tíbet secreto: origen y desarrollo de la expedición.

Lo primero que debes saber es que en 1933, justo entre las dos expediciones de Dolan, Schäfer se afilia a las SS. ¿Era un nazi convencido o tal vez sólo un oportunista que deseaba medrar?. Es difícil de decir. Los funcionarios británicos que lo trataron en el Tíbet aseguraron que era un "nazi fanático", pero cuando en 1945 los estadounidenses lo investigan para determinar su grado de participación en el régimen nazi, Schäfer trata de exculparse asegurando que sólo quería medrar, que se afilió "obligado" por las circunstancias de que su carrera no despegaría si no pasaba por el "aro" nazi. Es uno de los primeros misterios que los historiadores deberán aclarar en esta oscura expedición.

El caso es que durante el verano olímpico de 1936, mientras se celebraban los Juegos Olímpicos en Berlín, Himmler llama a Schäfer a su despacho en Prinz-Albrechtstrasse. Como no se conserva ningún registro sobre su conversación, no queda claro quién convenció a quién. El caso es que ambos quedan de acuerdo para organizar una nueva expedición al Tíbet que será 100% alemana, sin ningún anglosajón de por medio.

Esvásticas en una pared en Tíbet (Foto: E. Schäfer)

Pero Himmler desea que la expedición investigue temas extraños: el jerarca nazi está convencido de que el origen de la raza "aria" (de la cual los nazis proclaman que el pueblo alemán es descendiente) se encuentra en Tíbet o que, al menos, llegaron hasta allá. Propone también que se investigue la existencia de ciertos "reinos" supuestamente fundados por los "arios" como el de Shambala, o extrañas teorías pseudo-científicas como la llamada "Cosmogonía Glacial". Para todo ello, Himmler ordena a Schäfer que se ponga en contacto con una sección de la SS llamada Ahnenerbe ("Herencia Ancestral"), que se dedica a organizar expediciones arqueológicas por todo el mundo en busca de los orígenes de los "arios".

Cartel del documental rodado por Schäfer Geheimnis Tibet (Tibet secreto), en 1943

Schäfer se siente incómodo con todo ello, pues él pretende organizar una expedición científica seria. Con gran habilidad política, logra quitarse de encima a todos estos pelmazos pseudo-científicos y pone sus condiciones para realizar una expedición científica. Finalmente se llega a un acuerdo: Schäfer se aprovechará de todo el aparato nazi para facilitar el desarrollo de la expedición, a cambio de buscar él financiación privada, ya que Himmler sólo aportó una cantidad simbólica. No le fue difícil reunir dinero de empresarios afectos al régimen nazi. Estos eran los participantes en la expedición:

- Ernst Schäfer: Zoología, dirección general.
- Edmund Geer: director técnico. Logística.
- Karl Wienert: Geología, hará fundamentalmente estudios geomagnéticos
- Ernst Krause: Botánica, Entomología, Cámara.
- Bruno Beger: Antropólogo. Realizará mediciones físicas de los pueblos de la región.

Todos ellos eran miembros de la SS, empezando por Schäfer, que tenía graduación de subteniente (Untersturmführer).

La forma más fácil de acceder al Tibet era seguir el camino de Dolan: remontar el Yangtsé y acceder por la porosa y poco vigilada frontera oriental tibetana, adonde China prácticamente no ejercía vigilancia ni autoridad alguna. Pero en 1937 estalla la guerra Chino-Japonesa y toca acceder al Tibet a través de la India británica. Un grave problema, pues los permisos de acceso al Tibet desde India se gestionaban a través de los británicos, que ejercían influencia en el Gobierno tibetano. Y en 1938 la tensión entre la Alemania nazi e Inglaterra era máxima.

De hecho, sólo la intervención del mismísimo Himmler a través de ciertos simpatizantes nazis de la alta aristocracia británica consiguió que les dejasen entrar en la India y emprender el viaje, ya con el monzón de 1938 encima, a través del Sikkim, una región de lujuriantes bosques tropicales y subtropicales, y donde la expedición recolectó muchos ejemplares botánicos y zoológicos de una región mal conocida, en pleno hotspot de biodiversidad del Himalaya Oriental.

Bosque de Sikkim (Foto: Carsten Nebel)

Los británicos pusieron todas las trabas habidas y por haber para evitar que los "nazis" entrasen en el Tibet. Temían que el verdadero propósito de la expedición fuera político: contactar con el Gobierno Tibetano y organizar algún tipo de movimiento militar para amenazar la India desde el Norte. Pero Schäfer era tenaz y finalmente optó por "colarse" por la frontera tibetana en Doptra, y desde allí negociar con éxito el permiso de entrada directamente con el Gobierno de Lhasa. Pasaron en Lhasa desde enero hasta marzo de 1939 realizando todo tipo de estudios, para continuar luego por la zona de Shigatse antes de volver a India por el Valle del Chumbi, por donde habían entrado en Tíbet, cargados con 18.000 metros de película, 40.000 fotografías, 2.000 objetos etnográficos, cientos de variedades de semillas de plantas domésticas, y miles de especímenes botánicos y zoológicos.

El final de la expedición se asemejó mucho a una huída: la guerra en Europa estaba a punto de estallar, y los alemanes temían ser capturados o internados por los británicos en la India, y que no pudieran regresar a casa. Himmler anduvo rápido y les facilitó pasajes para salir inmediatamente de Calcuta a bordo de un hidroavión de la British Imperial Airways que les llevó a Bagdad, donde les esperaba un Junkers de la Luftwaffe que les trasladó a Viena y, desde allí, otro avión les dejó en Berlín donde fueron recibidos por todo lo alto. Era el 4 de agosto de 1939.

Esto es lo que nos dice la Historia. Retomaremos este hilo cuando te hable de las conclusiones en el Epílogo. Pero lo que me interesa aquí es hablarte de los resultados faunísticos de esta rara expedición. Cuando leí hace algunos años el interesantísimo relato de esta expedición en la obra La Cruzada de Himmler, de Christopher Hale, quedé ciertamente decepcionado puesto que el autor se centró en los aspectos políticos e históricos de la expedición, y sólo habla de pasada sobre la zoología de la misma.

Por eso he investigado yo un poco por mi cuenta, y aquí te hablaré de esos resultados faunísticos.

Insectos

Desgraciadamente, por mucho que he buscado, sólo he podido encontrar una referencia acerca de los insectos recolectados en la Expedición Schäfer. Y tengo que agradecérselo al Dr. Wolfram Mey, conservador de Lepidópteros del Museum für Naturkunde - Leibniz Institute for Research on Evolution and Biodiversity, de Berlín, donde se encuentran custodiados la mayoría de los especímenes recolectados en la Expedición. El Dr. Mey me facilitó un artículo donde se relacionaban las mariposas recolectadas, exclusivamente de la familia Noctuidae.

Esta familia es la mayor de la superfamilia Noctuidea, mariposas exclusivamente nocturnas, pero un grupo controvertido en Taxonomía, porque se considera parafilético y se encuentra en revisión continua. Es una familia cosmopolita, esto es, extendida por todo el mundo, y se caracteriza por la posesión de una estructura en el metatórax llamada "esclerito nodular", que separa el tímpano de la conjuntiva en la cavidad timpánica. Se cree que su función es mantener los parásitos (normalmente ácaros) alejados del tímpano.

La expedición Schäfer recolectó doce especies de noctuidos, pertenecientes a tres subfamilias. Diez de ellas fueron colectadas en Sikkim, en aquel perdido reino de lujuriantes selvas montanas donde, sin duda, estas mariposas acudirían rápidamente en las húmedas noches al calor del fuego del campamento. Las otras dos especies (en realidad una especie y una subespecie) fueron recolectadas en el Tibet, y fueron precisamente estos dos especímenes tibetanos los que sirvieron de base para la descripción de dos nuevas especies. Empezaremos por ellas:

Subfamilia Noctuinae:

Euxoa amorpha alta.

Esta subespecie fue recolectada en tres localidades tibetanas: Samada, Gyantse y Khangma, en el mes de Junio de 1939. La subespecie sería descrita a partir de estos paratipos por Hreblay y Ronkay en 1998.

Subfamilia Heliothidinae

Helicoverpa tibetensis

Esta especie se recolectó en Gyantse, Tibet, en junio de 1939. El holotipo quedó depositado en el Museum für Naturkunde, de Berlin, y a partir de él se describió la nueva especie por Hardwick en 1965.

Otras especies de esta subfamilia recolectados (especies ya conocidas) fueron:

Cetrina bordeada Pyrrhia umbra, que vive desde Europa hasta Japón a través de todo el cinturón montañoso Anatolia - Irán -Pakistán - Nepal - China. Alcanza altitudes hasta 1.600 m

Cetrina bordeada

Adisura radiata- Si bien aparece esta especie en el artículo analizado, no he encontrado referencias modernas de este taxón. Posiblemente ya no se reconoce esta especie, y tal vez se ha integrado en otra especie del mismo género.

Adisura atkinsoni- Esta polilla tiene una distribución curiosa: África oriental y meridional, y también en Asia Sudoriental desde India hasta Sumatra, y también hasta Japón. Está considerada como una plaga en los cultivos de judías.

Subfamilia Acronictinae.

Nacna prasinaria- Descrita como Diphtera prasinaria por Walker en 1865, redescrita en 2016. Exclusiva de Sikkim (India)

Nacna pulchripicta- Descrita como Canna pulchripicta por Walker en 1865, redescrita en 2016. Exclusiva de Sikkim y Arunachal Pradesh (India)

Segunda y tercera: Nacna pulchripicta y N. prasinaria

Nacna splendens- Recolectada en Sikkim en noviembre de 1938.

Diphterocome pallida- Descrita como Diphtera pallida, Moore, 1867. Recolectada en Gotsa, Tibet (Junio 1939) y Sikkim (noviembre 1938). Presente también en Bután y Bengala.

Diphterocome discibrunnea- Descrita como Diphtera discibrunnea Moore, 1867. Muy cercana a D. pulchra, presente en China, Sikkim y Arunachal Pradesh

Viminia indica- Actualmente se considera un subgénero de Acronicta, por lo que lo correcto es designarla como Acronicta (Viminia) indica. Recolectada en Sikkim en noviembre de 1938.

Belciana kala nepalensis- El género Belciana está considerado como un complejo de especies un tanto heterogéneo. Se ha procedido en 2012 a la revisión de este género, y la especie B. kala se asignó al nuevo género Anabelcia. Para terminar, la subespecie nepalensis, que fue la recolectada por Schäfer en Sikkim, en Junio de 1938, y a partir de la cual fue definida la subespecie por Yashimoto en 1993, fue elevada a categoría de especie: Anabelcia nepalensis.

Donda eurychlora- Distribuida por India, Indonesia y Malasia.

Donda eurychlora

Las Aves

Para este capítulo de las aves estudiadas en la Expedición Schäfer, mi agradecimiento va para Pascal Eckhoff, asimismo del Museum für Naturkunde de Berlín, quien me facilitó un trabajo escrito por él, acerca de la colección de aves procedente de las tres expediciones de Schäfer al Tíbet, cuya referencia me facilitó para su consulta.

Schäfer estaba en su salsa en la Ornitología, por lo que se trata de una colección ingente: de 5 ejemplares en la expedición de 1931/32 a 230 en la de 1934/36 hasta la asombrosa cifra de 3.520 especímenes recolectados en la expedición que nos ocupa, la de 1938/39. Todavía en el día de hoy no están inventariados ni estudiados todos ellos. La mayoría de los ejemplares recolectados pertenecían al orden Paseriformes, con las familias más representadas (de mayor a menor): Timaliidae, Fringillidae, Muscicapidae, Passeridae, Alaudidae, Corvidae, Sylviidae, Motacillidae, Prunellidae, Turdidae, Nectarinidae, Paridae, y luego Columbidae, que es la primera familia que aparece, perteneciente a otro orden diferente del Paseriforme.

Colección de aves de la Expedición Schäfer

De todas ellas, la mayoría de ejemplares proceden de Sikkim, a pesar de ser un territorio muchísimo más pequeño en comparación con el Tibet, pero incomparablemente más diverso con sus bosques tropicales y subtropicales montanos, y donde transcurre el límite altimétrico de la Región Indomalaya con la Región Paleártica. Hay familias cuya totalidad de ejemplares recolectados procede de Sikkim: Phasianidae, Picidae, Campephagidae y Nectarinidae, y la abrumadora mayoría como en Sylviidae, Turdidae o Timaliidae. De hecho sólo en Fringillidae y Passeridae hubo mayoría de especímenes colectados en Tíbet. Es decir, 2/3 de las especies recolectadas procedían de Sikkim, proporcionando una valiosa información de la distribución de la ornitofauna en el límite del Indomalayo con el Paleártico.

Por tanto, será complicado extraer aunque sea sumariamente una pequeña muestra de las especies más interesantes, pero aun así lo intentaré.

Perdiz Lerwa

Empezaré por los Phasianidae (Galliformes), puesto que tengo debilidad por estas bellas aves, que están tan bien representadas en el Indomalayo. Por ejemplo,  la perdiz Lerwa (Lerwa lerwa), que vive en los Himalayas en los páramos alpinos entre los 3.000 y 5.000 metros de altitud. Se da un fenómeno de segregación espacial con la perdiz nival Himalaya, que ocupa terrenos rocosos mientras que la perdiz Lerwa se decanta más por praderas herbáceas. Es también bastante interesante cómo los galliformes nivales son abundantes en especies en estas altas montañas Himalayas. Schäfer recolectó también nada menos que dos subespecies del perdigallo tibetano (Tetraogallus tibetanus), concretamente T. t. aquilifer en Sikkim, y T. t. przwalskii en una anterior expedición con Dolan, en la zona de Qinghai (Tibet Oriental).

Perdigallo tibetano

Schäfer recolectó también uno de los faisanes más hermosos de todo el Órden: el faisán ensangrentado (Ithaginis cruentus), una verdadera sinfonía de colores que recibe su nombre del grupo de plumas rojas mezcladas con blanco que ostenta en su pecho. Es un ave que vive en el Himalaya oriental, pero ya es un ave forestal que no supera el límite de las nieves si bien llega a apurarlo. Schäfer recolectó diez ejemplares en diversas localidades de Sikkim, y uno en Tíbet. En Sikkim recolectó también un ejemplar de gallo salvaje (Gallus gallus murghi) que, como recordarás, es el ancestro salvaje del gallo doméstico.

Faisán ensangrentado

En cuanto a las Anseriformes, podría destacarte en primer lugar el ánsar indio (Anser indicus), un precioso ganso que vive en Asia central pero inverna en el subcontinente indio y Birmania. Se trata de una de las aves que pueden volar a mayor altura, pues en sus migraciones necesita superar las altísimas cimas del Himalaya: puede alcanzar los 9.000 metros de altitud sin desplumarse. En la expedición se recolectaron siete ejemplares: uno en Sikkim y seis en Tíbet. Schäfer también se encontró con una de las anátidas más extendidas: el tarro canelo (Tadorna ferruginea), que cría en las latitudes templadas de Eurasia y emigra en invierno a África y Asia meridional, si bien existen también poblaciones sedentarias. Schäfer recolectó 8 ejemplares en Sikkim y 3 en Tíbet.

Ánsar indio


Tarro canelo

Entre las Falconiformes, aparte de los grandes protagonistas de la avifauna Himalaya como el quebrantahuesos o el buitre del Himalaya, de los que ya te hablé en la crónica sobre la fauna tibetana, te destacaré el pigargo de Pallas (Haliaeetus leucoryphus), de la cual recolectó un juvenil en Tíbet. Es un águila pescadora que cría en el subcontinente indio, y es parcialmente migratoria. Depreda en peces y también en aves acuáticas. Los estudiosos han determinado que este pigargo retiene aún algunos caracteres morfológicos que llevan al origen de las primeras águilas pescadoras, en los trópicos. Otra de las más interesantes águilas que Schäfer recolectó fueron dos ejemplares en Sikkim del águila culebrera chiila (Spilornis cheela), una bonita águila de color achocolatado y con una curiosa cresta en lo alto del cráneo, extensible. Se trata de un águila muy extendida por el Indomalayo, con veinte subespecies de las cuales Schäfer recolectó de la subespecie nominal, que vive en el Norte de India y Nepal.

Pigargo de Pallas


Águila culebrera chila

Schäfer recolectó también un Caradriforme singular: el picoibis (Ibidorhyncha struthersii), único miembro de su propia familia, inconfundible con su pico largo, fino y curvado y su rostro negro en cuerpo gris. Su particularidad es que, a diferencia de las limícolas más comunes, que viven y se alimentan en playas o zonas costeras y de estuarios, el picoibis se alimenta en riberas de guijarros en ríos y lagos de las altas mesetas interiores de Asia central y el Himalaya. Es, pues, un ave de grandes altitudes y fue recolectada en Sikkim, en el Glaciar Zemu, por ejemplo. Otro caradriforme notable fue el chorlitejo mongol (Charadrius mongolus), que tiene una curiosa distribución para un limícola: por un lado se encuentra por encima de la línea de árboles en el Himalaya, y por otro en las playas de Siberia Nororiental e incluso se le ha llegado a ver en Alaska. Es migratorio e inverna en África oriental, Asia meridional y Australasia. En 1938 Schäfer recolectó su subespecie C. m. atrifrons, pero ese mismo año se describió una nueva subespecie con el nombre de Schäfer C. m. schaeferi, procedente de un ejemplar recolectado en la segunda expedición Dolan, en 1935. Actualmente se estudia elevarlo a especie propia: Charadrius atrifrons, lo que resolvería el misterio de su distribución disjunta.

Picoibis

Chorlitejo mongol

En Sikkim se recolectó también el único Psitaciforme de la expedición: la cotorra del Himalaya (Psittacula himalayana), una joya alada de color verde con cabeza oscura y pico rojo y amarillo, que vive a lo largo de toda la cordillera Himalaya desde Afganistán hasta Bután. Vive en bosques mixtos y bosques subtropicales de ribera hasta los 3.000 metros de altitud.

Cotorra del Himalaya

Sikkim fue también muy pródigo en pájaros carpinteros. la Expedición colectó nada menos que trece especies pertenecientes a nueve géneros. Compara, por ejemplo, con las siete especies de Picidae que tenemos en la Península Ibérica, pero mira la diferencia de superficies entre Iberia y Sikkim.

CONTINUARÁ...

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